La polémica continúa en Grecia en torno al tenista griego Stéfanos Tsitsipás, el número tres del mundo, que reconoció esta semana no haberse vacunado contra la covid-19 porque no es obligatorio para competir, a pesar de haber protagonizado una campaña gubernamental pidiendo responsabilidad a la ciudadanía.
El portavoz del Gobierno griego, Yannis Ikonomu, pidió a los ciudadanos que escuchen a los expertos y dijo que, aunque la habilidad de Tsitsipás como tenista no se puede poner en duda, no tiene ni los conocimientos ni la capacidad necesarios para evaluar la calidad de las vacunas disponibles o la necesidad de que ciertos grupos sean o no inoculados.
Ante la cantidad de comentarios que han mostrado decepción en redes sociales estos días, Tsitsipás aseguró este jueves que no está en contra de la vacuna pero, al mismo tiempo, mostró su escepticismo y defendió que alguien de su edad no tiene por qué ser inoculado.
«Soy joven, tengo menos de 25 años. Para mí, la vacuna no ha sido investigada lo suficiente, es algo nuevo. Tiene algunos efectos secundarios. Yo personalmente conozco a gente que los ha tenido», dijo el tenista de 23 años.
Además, Tsitsipás aseguró que lo mejor es que los jóvenes se contagien y pasen la enfermedad para levantar una barrera de inmunidad.
El Gobierno griego lleva meses intentando combatir esta idea e insistiendo en la necesidad de vacunarse, también para los jóvenes. Con ese objetivo, a comienzos de verano lanzó un programa de incentivos gracias al cual los inoculados con la primera dosis de entre 18 y 25 años reciben 150 euros para gastar en viajes y cultura.
Vía: EFE