Los hermanos dedicados a poner miguelitos en la Autopista Regional del Centro, conocidos como ‘Los sanguinarios’ o ‘Los pegadores’, fueron asesinados y sus cadáveres fueron dejados en la misma vía donde esperaban a sus víctimas.
Leonardo Palacios (22), y Eduardo Palacios (26), fueron hallados en la autopista y ambos cuerpos presentaban disparos en la cabeza, rostro y pecho, de acuerdo a lo reseñado por el diario El Aragueño.
Se presume que el hecho es un ajuste de cuenta debido a que las víctimas habían tenido un problema reciente con una banda rival.
La madre de ambos, Gladys González, estaba preocupada porque no sabía nada de sus hijos desde la tarde del miércoles. Al día siguiente recibió en la mañana una llamada: “Mataron a los muchachos cerca del ferrocarril”.
Los asaltos en las autopistas y carreteras se han hecho frecuentes en Venezuela y hasta el momento, no se han implementado medidas que ayuden a frenar este tipo de vandalismo.