Al menos 40 trabajadores de PDVSA Gas Comunal, que laboran en el Centro de Trabajo (CDT) de la ciudad de La Victoria, manifestaron su descontento por “múltiples irregularidades”, que afectan a este grupo de personas, que atienden los municipios Ribas, Bolívar, Revenga y Santos Michelena.
El problema más grave, según relataron los trabajadores, consiste en la falta de una sede propia, desde que salieron de San José de Zuata, dijeron que desde allí funcionaron hasta hace unos años, pero tuvieron que desalojar a causa de la inseguridad. Hoy este lugar está en total abandono, “pero creemos que pudiera recuperarse”, afirmaron.
“Los choros sometían a los vigilantes, y se llevaban los cilindros a cada rato”, dijeron los trabajadores, “sin embargo ya la delincuencia en la zona ha disminuido notablemente, y con una buena vigilancia se podría salvar esta sede”. Comentaron que “por ahora está llena de monte, y hace un tiempo fue quemada con varios vehículos adentro”.
“Desde que salimos de Zuata nos tienen del timbo al tambo”, prosiguieron, “primero nos mandaron a la Ciudad Socialista y ahora estamos arrimados en la sede de la Guardia nacional (…) por si fuera poco desde que según pasamos a Aragua Gas, se llevaron los dos únicos camiones que quedaban operativos, y de 30 cargas semanales que se hacían, ahora solo se hace una y con personal de Maracay”.
Los afectados aseguran que “desde la capital de Aragua nos mandan dos de los tres tripulantes que lleva el camión, por lo que solo uno de nosotros puede trabajar en cada viaje”, explicaron que “los choferes quedaron como ayudantes, y las entregas a domicilio se acabaron hace varios meses (…) de paso quedamos sin Gerente en La Victoria y ya no podemos administrar nuestros municipios como antes”.
Por otra parte los trabajadores del gas también dijeron tener otras carencias, como ausencia de HCM, un salario de 500 mil Bs S a la semana y más de 4 meses sin recibir la bolsa de alimentos que forma parte de sus beneficios, esto sin contar que tampoco le han llegado los uniformes, todos tiene hasta 4 vacaciones vencidas y al menos 5 esperan por su jubilación.
El llamado de estos trabajadores fue a las autoridades de Gas Comunal, “que nos dejaron a la deriva y sin respuesta de ningún tipo”, en su defecto “que sea el Gobernador quien nos diga algo, ya que se habla de Aragua Gas, pero nosotros seguimos cobrando por PDVSA (…) acá estamos fieles cumpliendo con nuestro trabajo, a pesar de no tener un salario digno para mantener a nuestras familias”.